El Gobierno de Cantabria reconoce la labor de Sor Clara al frente de la Cocina Económica durante seis años

El Gobierno de Cantabria agradece a Sor Clara por su labor en la Cocina Económica

En un emotivo acto realizado en Santander, el Gobierno de Cantabria expresó su profundo agradecimiento a Sor Clara por su dedicación y compromiso durante los últimos seis años al frente de la Cocina Económica. La consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Begoña Gómez del Río, y el consejero de Economía, Hacienda, Financiación Autonómica y Fondos Europeos, Luis Ángel Agüeros, fueron los encargados de transmitir la gratitud de todo el Gobierno autonómico a Sor Clara en su último día en la institución.

Un legado de solidaridad y compromiso social

Durante su gestión al frente de la Cocina Económica, Sor Clara ha sido una figura clave en la atención integral a personas en riesgo de exclusión social en Santander y en toda Cantabria. Su labor incansable y su compromiso con los más vulnerables han dejado una huella imborrable en la sociedad cántabra.

Reconocimiento de la sociedad y compromiso institucional

La visita de los consejeros Gómez del Río y Agüeros no solo sirvió para expresar el agradecimiento del Gobierno de Cantabria a Sor Clara, sino también para transmitir el reconocimiento de toda la sociedad a la labor realizada por la directora saliente. Asimismo, reiteraron el compromiso del Gobierno y de la presidenta María José Sáenz de Buruaga con el apoyo institucional a los fines sociales de la Cocina Económica.

Un ejemplo de solidaridad y generosidad

Sor Clara ha sido un ejemplo de solidaridad y generosidad para todos los que han tenido el privilegio de conocerla. Su entrega desinteresada y su dedicación a mejorar la vida de los más necesitados han sido un faro de esperanza en tiempos difíciles.

Un legado de humanidad y empatía

El trabajo de Sor Clara en la Cocina Económica ha trascendido las barreras de lo material para llegar al corazón de las personas. Su capacidad para escuchar, comprender y ayudar a quienes más lo necesitan ha sido un ejemplo de humanidad y empatía que nunca será olvidado.

En resumen, la labor de Sor Clara en la Cocina Económica ha sido un verdadero acto de amor y solidaridad que ha dejado una profunda huella en la sociedad cántabra. Su legado perdurará en el corazón de todos aquellos que han sido beneficiados por su generosidad y compromiso. El Gobierno de Cantabria y toda la sociedad le estarán eternamente agradecidos por su invaluable contribución a la comunidad.

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